IMPORTANCIA DE LA MEMORIA

 

1. MEMORIA: NOCIONES BÁSICAS 

1.1. DEFINICIÓN 1.2. TIPOS DE MEMORIA 

2. ¿POR QUÉ FALLA LA MEMORIA? 

2.1. FALTA DE ATENCIÓN 

2.2. EL DESUSO Y EL PASO DEL TIEMPO

2.3. LA INTERFERENCIA DE UNOS RECUERDOS SOBRE OTROS 

2.4. EL ESTADO EMOCIONAL 

2.5. FALLOS EN LOS PROCESOS DE MEMORIA 

3. CÓMO MEJORAR LA MEMORIA. 

3.1. PRESTAR ATENCIÓN 

3.2. CONTROL EMOCIONAL 

3.3. USO DE ESTRATEGIAS DE MEMORIA 

3.4. POTENCIAR LA ACTIVIDAD MENTAL 

1. MEMORIA: NOCIONES BÁSICAS 

1. Definición. En nuestra vida cotidiana recibimos una enorme cantidad de información y nuestro cerebro se enfrenta a la ardua tarea de tener que retener buena parte de ellas. Pues bien, la memoria es la capacidad que posee nuestra mente para codificar, almacenar y, posteriormente evocar, buena parte de nuestras vivencias personales y de la información que recibimos a lo lago de nuestra vida. La memoria es como un gran almacén o baúl donde guardamos nuestros recuerdos, recientes y lejanos. Gracias a ella reconocemos y nos es familiar todo lo que hay a nuestro alrededor (amigos, familia, objetos, monedas, billetes), organizamos nuestra vida y nuestras actividades: ir al médico dentro de X días; ir a recoger a nuestro nieto al colegio; tenemos un pasado: sabemos quiénes somos, dónde nacimos, cómo se llamaban nuestros antepasados, etc. Para poder memorizar o conseguir que la información que nos rodea y/o experiencias que vivimos lleguen a nuestro sistema de memoria pasa por una serie de etapas y/o procesos: Codificación. Es el proceso inicial por el que la información nos llega y se transforma en una representación mental. En estos momentos, la mente interpreta la información recibida inmediatamente en el cerebro a través de los sentidos. Si, además, se presta atención a esta información, el registro que se hará de ella será más rico y más resistente al olvido. Almacenamiento. Es el archivo y mantenimiento de la información para poder acceder a ella cuando se requiera, para ser utilizada cuando sea necesaria. Para que tanto el conocimiento que adquirimos como nuestras vivencias personales sigan almacenadas en nuestra memoria es conveniente acceder a ellas en la mayoría de las ocasiones.  Evocación de la información. Se refiere al hecho de recuperar o acceder a la información que, en su momento, fue registrada y almacenada. Implica llevar de nuevo el recuerdo a la conciencia. Existen distintas formas de evocación:  Libre. Es el recuerdo directo de información. Por ejemplo, recordar lo que debemos comprar sin llevar lista.  Por reconocimiento. En este caso, el disponer de distintas opciones nos puede permitir recordar lo correcto. Por ejemplo, los exámenes tipo test.  Inducida. Sucede cuando, sin nosotros pretenderlo, nos vienen de repente ciertos recuerdos a partir de un determinado estímulo. Por ejemplo, cuando el olor de un guiso nos «transporta» a momentos de nuestra infancia. 

1.2. Tipos de memoria 

◘ Según el formato de codificación Memoria sensorial: hace referencia a la información que evocamos representándola a través de los sentidos. Se distingue así entre memoria visual, memoria auditiva, memoria olfativa, memoria visoespacial. Memoria verbal: memoria para la información en forma de palabras, tanto oral como escrita.

 ◘ Según el tiempo transcurrido Memoria a Corto Plazo (MCP): es la memoria encargada de la información durante varios segundos o minutos en la mente a nivel consciente. Su capacidad es limitada, en torno a 7-9 elementos, y la información que retiene solamente se consolida si se transfiere a la llamada Memoria a Largo Plazo. Un ejemplo de cuándo emplearíamos este tipo de memoria es cuando queremos memorizar los números premiados de la loto que acaban de anunciar por radio o TV, hasta que podemos anotarlos en un papel.  Memoria a Largo Plazo (MLP): es la memoria encargada de mantener la información almacenada en nuestro cerebro durante períodos extensos de tiempo o de forma permanente. A diferencia de la MCP, su capacidad es ilimitada. Tipos: Memoria demorada: se refiere a los hechos ocurridos o la información presentada en los minutos previos. Memoria reciente: hace referencia a los hechos sucedidos o información recibida en horas, días o semanas anteriores (p. ej., lo que hicimos el fin de semana). Memoria remota: referida a los hechos que sucedieron o información que fue procesada hace muchos años. Por otra parte, en la MLP se almacenan distintos tipos de información, datos y aprendizajes, lo que da lugar a otros tipos de memoria. Los tipos de de MLP según el tipo de información alamacenada son: La memoria episódica o autobiográfica: es la que nos permite recordar hechos concretos, como lo que hicimos el pasado domingo, lo que hemos comido hoy, o cómo fue nuestro primer día a la escuela; también lo que debemos hacer mañana o recordar pagar las facturas a final de mes. En definitiva, el tipo de información que aquí se almacena es de significado personal y biográfico. La memoria semántica: en ella se almacena el conocimiento que poseemos de hechos y conceptos (conocimientos culturales y del mundo en general), además del significado de las palabras y el vocabulario en general. Gracias a la memoria semántica sabemos que Colón descubrió América, o que el plátano es una fruta. La memoria procedimental: en ella se almacenan nuestras habilidades y destrezas. Por ejemplo, gracias a la memoria procedimental podemos ir en bicicleta, conducir, nadar, coser, atarnos los zapatos, etc., sin esfuerzo mental, sin tener que pensar en cómo se hace.

2. ¿POR QUÉ FALLA LA MEMORIA? 

 2.1. La falta de atención La atención es la llave de la memoria: si no prestamos atención a las cosas, no vamos a poder almacenarlas. En ese sentido hay una forma muy frecuente de «despistes» que, en realidad, no supone un fallo de memoria sino más bien de atención. Por ejemplo, coger el coche para ir a casa de un amigo y, de repente, darnos cuenta de que estamos yendo hacia la casa de algún familiar que para nosotros es una ruta mucho más familiar; o ir a una estancia de la casa con la intención de hacer algo y, sin saber cómo, nos hemos puesto a hacer otra cosa distinta.

 2.2. El desuso y el paso del tiempo Los recuerdos se debilitan o decaen cuando no se usan. Una de las teorías que explica por qué puede suceder es la teoría del decaimiento, según la cual cada vez que se aprende algo se crea una nueva huella mnésica que, si no es evocada ni recreada durante mucho tiempo, decae, se debilita, pudiendo llegar a desaparecer y, por consiguiente, a perderse la información. Esto puede suceder, por ejemplo, cuando queremos llevar a cabo alguna operación matemática que se nos daba tan bien en la infancia (una raíz cuadrada, una regla de tres, etc.) o recitar los afluentes de un río. 

2.3. La interferencia de unos aprendizajes sobre otros. Hay ocasiones que ciertos aprendizajes y/o recuerdos compiten e interfieren entre sí. Cuando algunas informaciones son muy similares entre sí es fácil que se produzcan interferencias. Estas pueden ser de dos tipos: Proactiva: se produce cuando una información almacenada más antigua dificulta recordar datos más recientes. Por ejemplo: si nos vamos a conducir con un coche por Inglaterra. Retroactiva: sucede cuando el registro de nueva información interfiere en la capacidad para recordar información aprendida previamente. Un ejemplo: por fin nos hemos familiarizado con el manejo de un nuevo modelo de teléfono móvil cuando un día, por algún motivo, necesitamos usar el antiguo, y entonces nos 6 cuesta recordar cómo se abría la agenda, cómo se mandaba un mensaje, etc.

 2.4. El estado emocional. Todas las experiencias que tienen un impacto emocional se recuerdan con facilidad; ni las tragedias ni las alegrías se olvidan. Todo reside en una explicación hormonal: en esas circunstancias, la glándula suprarrenal secreta adrenalina y cortisol, las llamadas "hormonas del estrés". Paradójicamente, existe un fenómeno conocido con el nombre del olvido motivado: en ocasiones, aunque sea de forma inconsciente, participamos activamente en el olvido de algunos sucesos, especialmente los de naturaleza traumática o perturbadora, para tratar de evitar o minimizar el impacto emocional negativo que puedan tener. 

2.5. Fallos en los procesos de memoria. Fallos en el registro o codificación. Estos fallos suelen deberse a: fallos de atención, o bien a que no hemos prestado suficiente atención, bien porque algo nos ha distraído (nos daban un recado por teléfono mientras estábamos mirando la televisión; probablemente, luego no recordemos qué nos han dicho), bien porque la información que nos daban no nos interesaba o motivaba lo suficiente y, tal vez, estábamos absortos en nuestros propios pensamientos. la poca o mala comprensión de lo que se retiene; por ejemplo, leer de forma pasiva y superficial, sin reflexionar acerca de lo leído. Fallos en los procesos de almacenamiento: no hacer repasos; o hacer los repasos demasiado tarde y cuando ya se ha acumulado demasiada información. Fallos en los procesos de evocación. A veces, a pesar de que la información está almacenada en nuestra memoria, tenemos fallos en la evocación o recuperación de información. 

 3. CÓMO MEJORAR LA MEMORIA

 3.1. Prestar más atención a las cosas: la atención es la llave de la memoria. Tenemos que leer prestando atención, tenemos que prestar atención a las conversaciones, tenemos que prestar atención a lo que hacemos, etc. 

3.2. Realizar ejercicios para mejorar el estado emocional: relajación, respiración,.. Son especialmente útiles para el estudio, especialmente en épocas de examen.

3.3. Uso de estrategias de memoria. Conocidas también con el nombre de reglas o estrategias mnemotécnicas, algunas de las más conocidas son: Visualización: Visualizar es ver con la mente. Se sabe que una persona tiene menos dificultades a la hora de recordar si codifica y almacena la información con imágenes. Evocar imágenes es más fácil que evocar conceptos en abstracto o verbalmente. Asociación: cuantas más conexiones se establezcan mentalmente entre los conceptos nuevos y los que ya se poseen más fácil resultará la memorización. Hay diversas maneras de asociar: Comparar o contrastar: nos acordamos de algo porque se parece o se diferencia de algo que conocemos. Por ejemplo, la 2ª Guerra Mundial comenzó el año en el que nació mi padre. Realizar analogías: buscamos parecidos. Por ejemplo el nombre de una persona nos recuerda al de un famoso tenista. Realizar asociaciones ilógicas: tratamos de memorizar una lista de objetos realizando asociaciones sin sentido. Por ejemplo, una lista de compra (leche, galletas, tomate, pan y cebolla): "Una galleta se fue a bañar en un vaso de leche, pero cuando se fue a tirar vio que 8 estaba roja del color del tomate, flotando había un trozo de pan jugando con una cebolla." Agrupación: consiste en juntar en varias unidades una información que es relativamente extensa. Por ejemplo, si queremos recordar un número de teléfono -917104026- nos resultará más fácil si los números los juntamos en pequeños grupos: "91-710-40-26". Categorización: consiste en agrupar la información por categorías. Por ejemplo, una lista de compra: leche, galletas, lejía, tomate, detergente, pan y cebolla, podríamos agruparlo de la siguiente manera: Cosas para el desaryuno: leche, galletas. Productos de limpieza: lejía, detergente. Otros productos de comida: tomate, pan y cebolla. Repaso y/o repetición: consiste en repasar y repetir de vez en cuando aquellas cosas que son importantes y debemos recordar es muy útil, sobre todo en el caso de recuerdos de nombres de calle, de nº de teléfono, nombres de personas.

3.4. Potenciar la actividad mental. Algunas actividades que mejoran especialmente la memoria: Pasatiempos: crucigramas, anagramas, etc. Juegos: Juegos memory Trivial Juegos de lenguaje: scrable, ahorcado, etc. 9 Realización de actividades mentalmente complejas y estimulantes en libros especializados y/o talleres de estimulación mental. 

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